Las personas del equipo de la lanzadera de Santander apenas habían realizado entrevistas de trabajo en los últimos años, no únicamente por falta de oportunidad sino también porque habían entrado en sus últimos trabajos sin enfrentarse a una de ellas. El objetivo del taller lo teníamos claro: que todas las personas entrenasen y mejorasen las competencias necesarias para afrontar una entrevista de trabajo. ¿Cómo?

• Afrontando un proceso de selección en fase de entrevista individual y en fase grupal para que identificasen fortalezas y áreas de mejora,
• Dando a conocer diferentes formas de seleccionar y medir de competencias en las entrevistas,
• Con técnicas de exposición que dotan de seguridad en sí mismos/as
• Exponiéndolos a una situación real que pudiera suponer un punto débil personal en un proceso de selección que sirva de preparación, que siempre es mejor en un entorno seguro.

De este modo mantuvimos tres sesiones en las que pudimos bucear en los entresijos de las entrevistas, de las buenas prácticas y las cagadas históricas; meternos en la cabeza de quiénes se dedican a la selección de personal y vivir en primera persona un proceso de selección en fase individual y grupal.